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Creatividad organizacional: influencias de la asincronía y el conflicto

El conflicto normalmente sucede de situaciones en las que las personas tienen, simultáneamente, intereses para cooperar e intereses para competir. Los elementos competitivos incentivan el conflicto y los elementos cooperativos lo proyectan hacia una solución. Una vez originado, el conflicto puede tener diferentes soluciones y consecuencias positivas o negativas para la organización.

La creatividad organizacional

La creatividad organizacional es entendida como la producción de ideas nuevas y útiles (Amabile, 1988; Shalley et al., 2004). En los entornos organizacionales, se considera que las ideas son nuevas cuando “son únicas en relación con otras ideas actualmente disponibles en la organización” (Shalley et al., 2004, p.934), y son útiles cuando “tienen un potencial valor, directa o indirectamente, para la organización, a corto o largo plazo (Shalley et al., 2004, p. 934). Dado que la creatividad implica generación de ideas, es un precursor de la innovación, que incluirá la implementación de estas (Amabile, 1988; West, 2002).

creatividad

En las organizaciones, las ideas creativas pueden ser parte del trabajo de ciertos empleados (por ejemplo en el caso de empleos en I+D+i), o ser un rol extra en el comportamiento del trabajador, por ejemplo cuando la organización solicita sugerencias o ideas a sus empleados.

La demanda creativa en el trabajo

En relación con las demandas del trabajo, Unsworth (2001) distingue entre trabajos de alta demanda creativa y de baja demanda creativa. Por otra parte, es importante destacar que en función de la actitud de los empleados hacia la creatividad y del comportamiento que despliegan, la eficacia organizacional se verá incrementada o mermada. De ahí la importancia que cobra la creatividad en la organización y para su supervivencia.

La relación individuo – entorno en la creatividad organizacional

A nivel individuo, se considera que la creatividad tiene tres dimensiones: la dimensión cognitiva, la no cognitiva y la motivacional, si bien, el entorno juega un papel destacado en el despliegue del comportamiento creativo si se compara con cualquiera de las citadas dimensiones individuales, frecuentemente sobrevaloradas, como suele ocurrir con el talento.

Cómo afectan la asincronía o conflicto a la creatividad organizacional

Hay un factor relacionado con las influencias del entorno y la mejora de la creatividad en las organizaciones: la asincronía. Algunos autores la emplean como sinónimo de tensión, conflicto, disonancia o desequilibrio.

conflicto

Según algunos autores, la asincronía es beneficiosa para la creatividad organizacional porque se entiende que la innovación y el conflicto son concomitantes. Así, West (2002) argumenta que si se introduce una nueva forma de hacer algo en la organización y esto no genera conflicto (no hay desacuerdos sobre el contenido o el proceso de innovación propuesto), o no hay resistencia de los miembros ante la nueva propuesta, entonces esa innovación no es algo realmente novedoso o no supone una contribución importante para la organización. La innovación siempre reta al status quo y esa situación retadora genera el conflicto.

Los resultados de diversos estudios realizados en entornos laborales muestran que existen varios beneficios del conflicto o asincronía. Sobre la base de estos beneficios, algunos autores proponen promover la asincronía en las organizaciones para que la creatividad florezca.

Thompson (1965) critica las condiciones que se dan en las burocracias dirigidas por estructuras sociales monocríticas, que persiguen la productividad y el control, y la forma en que estas estructuras afectan negativamente a la creatividad. Sostiene que si se desea innovar, hay que cambiarlas por otras estructuras más flexibles y descentralizadas que permitan mayor libertad de comunicación, rotación de posiciones, modificación del sistema de incentivos, así como, otros cambios en la gestión.

Posibles moderadores de la relación conflicto – creatividad organizacional

Se ha detectado que el conflicto mejora o empeora la creatividad en función de la situación y de las personas implicadas en la misma. En este sentido, la percepción sobre el conflicto suele mejorar la creatividad en tareas coincidentes con la orientación personal, mientras que la creatividad se inhibe en tareas que se salen de esa orientación o preferencias personales. Al parecer, si la tarea es una actividad preferida por el individuo el conflicto puede interpretarse como un reto, mientras que si la tarea no forma parte de sus preferencias, el conflicto se interpreta como un contratiempo o situación problemática no deseada.

En cualquier caso, son pocos estudios que hayan analizado los efectos de la asincronía y el conflicto en la creatividad, por lo que cualquier conclusión al respecto es simplemente tentativa por el momento, pues no está basada en suficientes evidencias.